De lo temporal a lo permanente: el poder del urbanismo táctico en transformar nuestras ciudades
Por Hugo Moreno Freydig
En los últimos años, el urbanismo táctico se ha posicionado como una herramienta poderosa para transformar el espacio público de manera rápida, accesible y participativa. Desde intervenciones con pintura y mobiliario temporal hasta eventos comunitarios y cierres de calles, este enfoque demuestra que no siempre se necesitan grandes obras para generar cambios significativos en la vida urbana.
Pero lo más valioso del urbanismo táctico no es solo su impacto inmediato, sino su potencial para abrir la puerta a transformaciones permanentes. En este artículo, te explicamos por qué es importante, cuáles son sus beneficios, y cómo una ciudad como Hermosillo ya ha dado pasos importantes para consolidar estos esfuerzos.
¿Qué es el urbanismo táctico?
El urbanismo táctico (también conocido como tactical urbanism) es una estrategia de intervención urbana que se caracteriza por ser:
- Temporal
- De bajo costo
- De rápida implementación
- Altamente participativa
Este tipo de intervenciones permite probar nuevas ideas sobre cómo usar y distribuir el espacio urbano, sin necesidad de hacer obras definitivas desde el inicio. Puede incluir pintura en el asfalto, mobiliario provisional, señalética, jardineras móviles o intervenciones artísticas. La idea es experimentar a pequeña escala, aprender de la experiencia y, si funciona, escalar hacia una transformación más duradera.
¿Por qué es importante?
El urbanismo táctico permite responder rápidamente a necesidades ciudadanas que de otro modo tomarían años en resolverse a través de los canales tradicionales. También es útil para reclamar el espacio público en ciudades donde el automóvil ha dominado durante décadas.
Entre sus beneficios se encuentran:
- Aumenta la seguridad vial (reduce velocidad de autos, mejora visibilidad y cruce peatonal)
- Promueve la convivencia y el uso activo del espacio público
- Fomenta la participación ciudadana en el diseño de su entorno
- Sirve como herramienta para probar antes de invertir en obras permanentes
- Aporta datos reales sobre cómo la gente usa el espacio
¿Cómo se transforma en infraestructura permanente?
No todas las intervenciones tácticas están pensadas para quedarse, pero las más exitosas logran demostrar su valor al grado de justificar una inversión mayor. Para que eso ocurra, suelen seguirse estos pasos:
Diagnóstico y objetivo claro
Se identifica un problema urbano (por ejemplo, inseguridad peatonal en un cruce, abandono de un espacio, exceso de autos).
Diseño participativo
Se diseña con el apoyo de comunidad, colectivos, profesionistas o autoridades locales. Se establecen objetivos medibles.
Implementación temporal
Se ejecuta la intervención usando materiales accesibles y reversibles.
Evaluación de resultados
Se observan los cambios en la forma en que las personas usan el espacio. Se recopilan datos y testimonios.
Incidencia y escalamiento
Si la experiencia es positiva, se busca el respaldo de autoridades para invertir en infraestructura permanente.
Caso Hermosillo: el espacio peatonal en Blvd. Hidalgo frente al Palacio Municipal
Un ejemplo emblemático de urbanismo táctico convertido en infraestructura permanente lo encontramos en el área entre camellones del Blvd. Hidalgo, justo frente al Palacio Municipal de Hermosillo.
Durante décadas, este espacio era un pasillo vehicular sin sentido, utilizado para estacionamiento improvisado y como atajo para autos. Aunque se ubicaba en el corazón cívico del centro, las personas no lo podían usar ni disfrutar.
En 2020, en el contexto de una creciente conversación sobre movilidad peatonal y espacios seguros, se llevó a cabo una intervención de urbanismo táctico:
- Se cerró el paso a los autos.
- Se pintaron cruces peatonales y se colocaron delimitaciones temporales.
- Se colocaron árboles grandes en maceta.
- Se recuperó el espacio para el uso exclusivo de peatones.
La reacción fue inmediata: personas que antes evitaban el área comenzaron a usarla para caminar, sentarse, tomar fotos o simplemente cruzar con mayor seguridad. Se convirtió en un espacio de encuentro y permanencia.
Gracias al éxito de esta acción, el Municipio decidió invertir en su consolidación. Hoy, ese espacio ha sido reconfigurado como área peatonal permanente, con mejores materiales, jardinería, iluminación y una mejor integración al entorno urbano. Es un claro ejemplo de cómo una intervención temporal puede cambiar la percepción del espacio y abrir la puerta a un rediseño más humano, de manera permanente.
Otros ejemplos inspiradores:
- Times Square, Nueva York: lo que inició con pintura y mobiliario temporal en 2009 hoy es una de las plazas peatonales más famosas del mundo.
- Ciudad de México (Madero y Centro Histórico): varios cierres temporales dieron paso a la peatonalización formal de calles que hoy disfrutan millones.
- Lima, Perú (Plaza Bolognesi): intervención de colectivos con conos, pintura y bancas portátiles para reconfigurar una glorieta en un espacio público útil.
Conclusión
El urbanismo táctico nos recuerda que no siempre hay que esperar a tener grandes presupuestos o megainfraestructuras para mejorar nuestras ciudades. A veces, la transformación empieza con pintura, bancas móviles y la voluntad de imaginar algo diferente.
Más importante aún: cuando las personas viven y disfrutan esos cambios, se vuelve más fácil defenderlos, exigir su permanencia y construir ciudades más humanas, accesibles y sostenibles.
Autor:
Hugo Moreno Freydig
Arquitecto, Maestro en Ciencias Ambientales y activista por la movilidad sostenible, accesibilidad universal y seguridad vial. Cofundador del despacho de urbanismo y arquitectura: UrbanDot.mx

